Boca Juniors selló su pase a los cuartos de final de la Copa Libertadores en una noche de emociones intensas, con una victoria por penales ante Nacional de Uruguay. En un enfrentamiento que mantuvo en vilo a los aficionados hasta el último minuto, Chiquito Romero emergió como la figura destacada con dos atajadas cruciales en los tiros desde los doce pasos, asegurando el triunfo para el equipo de Jorge Almirón.
Resumen del partido
El encuentro en la Bombonera estuvo lleno de momentos de tensión y alternativas en el marcador. Boca Juniors y Nacional se enfrentaron con determinación, buscando cada oportunidad para inclinar la balanza a su favor. El marcador global de 2-2 en los 180 minutos de juego reflejó la intensidad y equilibrio entre ambos equipos.
En el desarrollo del partido, Boca Juniors tomó la delantera en dos ocasiones gracias a los goles de Miguel Merentiel y Luis Advíncula. Sin embargo, Nacional de Uruguay no se rindió y respondió con anotaciones de Alfonso Trezza y Juan Ramírez, exponiendo desajustes en la defensa local.
La tensión llegó a su punto máximo en la definición por penales, donde la destreza de Chiquito Romero bajo los tres postes se erigió como un factor determinante. El arquero argentino adivinó las intenciones de los pateadores rivales, deteniendo los remates de Juan Ramírez y Daniel Bocanegra. A pesar del fallo de Pol Fernández desde el punto penal, Valentín Barco selló la victoria con un gol certero que desató la celebración en La Bombonera.
Con la clasificación en mano, Boca Juniors ahora espera a su próximo rival en los cuartos de final. La mirada está puesta en el cruce entre Atlético Nacional y Racing, que se definirá en el encuentro de este jueves en el Cilindro. La Academia buscará una remontada tras el 2-4 sufrido en Medellín, mientras Boca Juniors aguarda con determinación la siguiente etapa de la competición.
Esta victoria en los penales evoca el recuerdo de la edición 2016 de la Copa Libertadores, cuando Boca Juniors también prevaleció en la tanda decisiva. En esta ocasión, la habilidad de Chiquito Romero y la valentía de los pateadores xeneizes sellaron un emocionante pasaje a los cuartos de final, en un enfrentamiento que quedará grabado en la historia de ambos equipos y en la memoria de los aficionados.