Boca Juniors lo hizo una vez más, avanzando a las semifinales de la Copa Argentina, esta vez venciendo a Talleres de Córdoba en una emocionante tanda de penales. Sorprendentemente, incluso con un arquero especialista como Sergio Romero, ni siquiera fue necesario que atajara un solo penal, ya que su mera presencia en el arco fue suficiente para intimidar a los rivales.
El capitán de Boca, Marcos Rojo, destacó la influencia de Romero en la tanda de penales: «Es la presión que les mete Chiqui. Ya a los rivales los intimida con su presencia. Saben que es un grandísimo arquero en los penales y tratan de ajustar al máximo sus tiros, por eso se les van. Estamos muy contentos por el pase», explicó el central, reconociendo el papel de Romero en el triunfo.
La experiencia y la reputación de Romero en penales fueron claves para que los jugadores de Talleres, Bustos y Benavídez, desviaran sus remates por encima del travesaño. Los rivales, conscientes de su habilidad, intentaron ajustar demasiado sus tiros y evitar que Chiquito atajara sus remates. La presión ejercida por el arquero de Boca en estas situaciones sigue siendo una ventaja para el equipo y un motivo de esperanza en caso de futuras definiciones por penales, como una posible final de la Copa.
Sin embargo, en esta ocasión, Boca se aseguró de no depender de la tanda de penales para avanzar. Marcos Rojo subrayó la superioridad del equipo en el tiempo regular: «La verdad es que si hubiéramos perdido en los penales, nos habríamos sentido muy frustrados. Dominamos durante los 90 minutos y tuvimos más oportunidades que ellos, pero nos faltó el gol. Estoy contento por el equipo y el esfuerzo que hemos estado haciendo, y estoy muy feliz por el pase a las semifinales de esta Copa».
Además de su destacado rendimiento en el campo, Rojo comentó sobre la ausencia del VAR en la Copa Argentina y las decisiones arbitrales, incluyendo una jugada polémica que involucró una posible mano en el área que no se sancionó. «Se ve clarísimo que es penal y le da en la mano», afirmó Rojo, señalando una de las situaciones que generó controversia en el partido.
Ahora, Boca se enfrentará a Estudiantes de La Plata en las semifinales de la Copa Argentina, una coincidencia especial para Rojo, quien ya demostró su calidad en la defensa y su capacidad para marcar goles contra su antiguo club. Su presencia en la semifinal será una ausencia sentida en la final del Maracaná debido a una tarjeta roja en la semifinal con Palmeiras. La banda de La Plata estará expectante, y el futuro de Boca en el torneo está lleno de emoción y desafíos.